Actualidad Cultural
FUENTE: RFI Radio France International
El presidente francés presenta este miércoles los primeros proyectos de transformación para convertir a la capital francesa en una “ciudad-mundo” capaz de rivalizar con las grandes metrópolis internacionales. Este mega proyecto conocido como “Gran París” debutará con mejoras substanciales en el transporte público, por un monto de 35 millardos de euros.
En Francia es tradición que los presidentes dejen algún legado arquitectónico o urbanístico. Georges Ponmpidou dejó el Centro Pompidou, François Mitterrand la Pirámide del Louvre, Jacques Chirac inauguró el Museo del Quai Branly dedicado a las Artes Primitivas.
Nicolas Sarkozy, de su lado, quiere ser el artífice de la gran transformación de París en los comienzos del siglo XXI. El actual mandatario francés presenta este miércoles una lista de de proyectos de reforma y mejora del transporte público capitalino, obras que darán el pitazo de inicio del “Gran París”.
Este plan tiene por objetivo la transformación más ambiciosa de la capital francesa desde la liderada por el barón Haussman, a mediados del siglo XIX.
El principal anuncio que se espera del presidente será un plan de 35 millardos de euros de inversión a desarrollarse en los próximos 12 años en la región parisina, con el fin de mejorar las condiciones de vida de unos 10 millones de habitantes de la capital y de sus suburbios.
Contrariamente a Londres, donde residen ocho millones de personas, París cuenta con apenas 2 millones de habitantes intramuros, cercados por el bulevar periférico, una autopista urbana que marca claramente la separación con los suburbios.
La idea de Christian Blanc, secretario de Estado encargado del Gran París, es crear un súper metro automático de 130 kms alrededor de París, que permita vincular los diferentes “polos económicos” y descongestionar las líneas actuales del metro, hoy en día saturadas.
Luego de la aventura del metro en la primera mitad del siglo XX, la construcción del RER – el sistema de trenes que atraviesan la ciudad hasta las afueras – lanzado por el general Charles de Gaulle en 1965 e inaugurado en 1977, Nicolas Sarkozy espera con esto lanzar una tercera “revolución” del transporte parisino.
En este mega proyecto participan diez equipos de arquitectos franceses e internacionales, quienes coinciden en la necesidad de mejorar los medios de desplazamiento en París. Entre los arquitectos están los conocidísimos Jean Nouvel y Christian de Portzamparc, el británico Richard Rogers o el holandés Winy Maas.
Esta visión particular para el Gran París será seguida de cerca por Blanc, ex director de la RATP (Red Autónoma de Transportes Parisinos), quien convenció a Sarkozy de la necesidad de vincular la capital a su periferia. Para Blanc, el futuro metro es un tema estratégico para mejorar el atractivo económico de la región de París.
Sarkozy, por cierto, espera recoger algunos dividendos políticos de esta operación, por ser la mejora del transporte una de las principales demandas de los habitantes de París.
Los trabajos comenzarán en 2012, precisamente, año de la próxima elección presidencial.